
Caravana de sueños, mis sueños.
Afectuosamente elevo mis pies
dejando huellas en arenales de olvido.
Me nutro de elixires deliciosos,
disfruto la consigna de ser sólo instinto.
Es que hubo leyendas de cárceles y libertades
mas opté, sin ser viento, por volar sin concesiones.
Me derrumbé en tantos ecos
pero crecí entre silencios;
hoy soy fortaleza indemne.
Respiré mares de sal
y el espanto trajo azahares despertándome.
He muerto cuando la vida me impregnaba miedos,
ahora vivo venciendo voluntades ajenas.
Sigo en la caravana, sé donde está el camino.
GUSTAVO TISOCCO
www.poemasdegustavotisocco.blogspot.com
1 comentario:
Muchas gracias Susana por este lugar en tu bello sitio, un abrazote Gus.
Publicar un comentario